EL ESPEJO
Tengo
40 años, un buen trabajo y en mis pocos ratos libres colaboro con una ONG
llamada “Niñas de África”. Estoy muy comprometido con ella, me duele pensar que
muchas de esas niñas no llegaran a ser mujeres libres y completas.
Tengo
una insatisfacción permanente que no me deja disfrutar de los pocos momentos
buenos que nos da la vida, por eso pongo
todo mi esfuerzo en ayudar a los demás para intentar llenar ese vacío que
siento.
Esta
mañana me ha ocurrido una cosa muy
extraña, la imagen que se reflejaba en el espejo no era la mía, en él había la
cara de una señora, que por su peinado y ropa no era de este tiempo, haciendo
los mismos gestos que yo. Ella era mi espejo. Me pareció bella, sus ojos
reflejaban tristeza y sus labios, finos y elegantes, cierta determinación.
Me
sorprendió pero no sentí temor. Había en ella, en su rostro, en sus maneras,
algo familiar que me atraía y hacia
vibrar fibras muy sensibles en mi interior.
Busque otros espejos y allí estaba ella. Yendo al trabajo me miraba
con disimulo en los cristales de los comercios y seguía allí, ahora todo su
cuerpo repetía mis movimientos, mis gestos, mi andar. Su imagen era
tranquilizadora y pensé, por fin tengo
una amiga que no me abandona.
Al
volver a casa cené rápido, le di las buenas noches a mi espejo y caí en un
profundo sueño. Me desperté sobresaltado,
alguien había pronunciado en voz alta un nombre de mujer que me era familiar. En la butaca al lado de
mi cama estaba ella, mi espejo.
Entonces
habló: Te has preguntado ¿Por qué no sientes temor ante mi presencia? Eso que se ha removido
dentro de tí al verme ¿Sabes ya lo que es?
Si,
ahora lo ves claro ¿Verdad? Ya has entendido que soy tú, en una vida pasada.
Has
tenido, como todos, muchas vidas y aunque no nos acordemos después, siempre
dejamos un rastro, un poso de lo que hemos sido y tú en tus otras vidas has
sido una mujer, esa es la causa de tu desazón. En esta se ha producido un error
que tienes que asumir o corregir.
Puede
que desde el principio todo haya sido un sueño, pero ha llegado la hora de
afrontarlo y actuar.
Ese espejo, esas vidas pasadas....
ResponderEliminarAveces amigo y otras no tanto, pero, como tú describes en esta historia, hay sigue recordándonos pasado, presente y posiblemente, hasta futuro👏👏👌👄👄👄