sábado, 9 de diciembre de 2023

ULTIMA DECISIÓN

 

ULTIMA DECISIÓN

 

Mientras le vendaba los ojos, el verdugo suspiro y con gran angustia aceptó que tenía que ser él, como tantas otras veces, quien acabase con la vida de ese pobre desgraciado que apenas había empezado a vivirla.

No era fácil su profesión, sus muertos le pesaban como si él hubiera dictado la sentencia, ya no podía soportarlo más, por las noches aparecían sus caras y un dedo acusador.

Con un rápido movimiento, que los presentes no pudieron intuir, se puso él la soga al cuello y accionó la palanca. Seguro que encontraría la paz yéndose con ellos.

1 comentario:

  1. Por momentos me ha recordado a "El Verdugo" de Berlanga. Las circunstancia y la vida te pueden llevar hasta un trabajo que odies.

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