EL
CÓMPLICE
Le dice
que yo no existo y tiene el valor de mentirle. Ese hombre de la bata blanca
sabe muy bien quién soy, su mejor amigo, siempre estoy a su lado ayudándole a
comprender este mundo que no entiende. Algunas veces equivocadamente para las leyes
que rigen esta sociedad que detestamos.
Hay
muchos como yo, ayudando a otros a conseguirlo, no se nos ve, se nos niega la
existencia pero siempre estaremos unidos en una dualidad inseparable.
No
fueron accidentes, nosotros estábamos allí, yo el inspirador y mi amigo el
ejecutor.
El otro
YO existe.
Difícil sustraerse a ese otro YO.... y a veces tenemos más de uno
ResponderEliminar