EL HUMO
Jugó a
dibujar figuras de humo con el que salía
de la estufa donde estaba quemando los papeles que lo implicaban en los asesinatos. Su imaginación creaba con él, imágenes de un pasado que quería
olvidar, ahora era una persona respetada, tenía una familia, todos sus crímenes habían prescrito y él quemaba los últimos vestigios que lo acusaban.
Había escapado de todos, o eso creía, no se daba cuenta de que las figuras
formadas en su mente lo estaban
envolviendo en un humo tan espeso que le costaba trabajo respirar, pero
siguió quemando y recordando, al final se hizo justicia.
Y se fué tan contento de su crimen perfecto sin darse cuenta que se le escapó el último detalle... creo...
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