LA
PUERTA
El
temita de las bajantes puso la reunión al rojo vivo. Abrirían por baños del 5º, A o B.
La soltera de buen ver del 5A puso el grito en el cielo, además quería
fastidiar al viudo del 5B por “cosas pendientes”. Como no hubo acuerdo se hizo
un sorteo tocándole el “marrón” a ella, que casi se desmaya. El viudo al ver su
estado prometió pasar todos los días para ayudarle. Un día no volvió a su casa,
los albañiles amables habían abierto una
puerta que los comunicaba.
A esas “malditas
bajantes” siempre las recordarían con cariño.
Nunca llegas a conocer a una persona si no la tratas :-)
ResponderEliminar